Comportamiento Organizacional
fab rican te de m ate ria l aislan te , encon traron que. a p e sa r de ap licar m ucho s cambios, carecían de capacidad p a ra sa tisfacer el a um e n to de la dem and a de su p roducto en el mercado. A m ed iados de los año s se ten ta . E stado s Unidos y C an ad á p a sa ron po r u n p a r de añ o s de inflación acele rada y ta s a s de in te rés que jam á s h ab ían reg istrado en e s te siglo. La inflación llegó a u n máximo a n u a l de m á s del trece po r ciento y las ta s a s de in te rés p a s a ro n del dieciséis por ciento. Los com p rado res po tenciales de c a sa no pod ían calificar p a ra créd itos y m u cho s con stru c to res queb ra ron . Casi tod a s la s em p re sa s bien adm in is trad a s cam b iaron s u s políticas de pagos e inven tarios. Por ejemplo, re su lta b a sen sa to u s a r el d inero de los proveedores y re tr a s a r el pago de c u e n ta s lo m ás posible. También reducir los inven tarios a niveles m ínimos ab so lu to s p a ra reduc ir los a ltos costos de manejo. En té rm ino s del compor* tam ien to organizacional, las expectativas de los em p leados p a ra aum en to s sa la ria le s aum e n ta ro n no tab lem en te. M uchas em p re sas en con tra ron que les e ra imposible p ropo rcionar aum en to s, incluso por m éritos, p u e s al a ju s ta rs e al costo de la vida con sum ían la c an tid ad de d inero que h ab ían reservado p a ra los aum en to s salariales. D u ran te e s te periodo, decayó el án im o de la s organ izaciones y aum en tó la ro tación de personal. Otro ejemplo de shock económico se ría el desplome del m ercado de valores de oc tub re de 1987. Aunque este d e rrum b e tuvo con secu en c ia s en los p lanes de financiam ien to y el valor de m ercado de casi tod as las em p re sas de dom inio público, resu ltó devastado r p a ra la in d u s tria de los servicios financieros. En seguida, se p re sen ta ron desp idos m asivos en Wall Street. Varias de las g randes em p resas de corredores, p a ra sobrevivir, tuv ieron que r e e s tru c tu ra rs e o fusionarse. Otro shock p a ra la indu stria de los servicios financ ie ros ocu rrió a finales de 1989, cuando se desmoronó el m ercado de los llam ados “bonos cha ta rra", el cual, casi por cu en ta propia, acabó con la locu ra de la adqu isición de em p re sa s y las comp ras ap a la n c ad a s de los añ o s ochen ta . Por o tra pa rte , el shock redu je significativamente los activos de m u ch a s com pañ ías de segu ros y fondos de pensiones. Uno de los ú ltim os shocks de la econom ía h a n sido el incum p lim ien to masivo de pagos de p réstam o s y aho rros, lo cual, a su vez. h a deprim ido los precios de los b ienes raíces, p roduciendo eno rm es pé rd id a s a qu ienes de sarro llan b ienes raíces y a o tra s p e rson a s relacionada s con la in d u stria de los b ienes raíces. Pa ra lo que re s ta de los año s noven ta podemos prever, casi con cien por ciento de segu ridad , que h a b rá uno o varios sho ck s económ icos de la m ism a m agn itud que los de los dos decenios p a sado s. El prob lem a es que no se p u ed e prever cuá les s e rán los shock s ni de dónde v end rán . É sa es la iron ía del cambio en u n a e ra de falta de con tinu idad : Sabem os con certeza qu e el m añ a n a no s e rá como el hoy. pero no sabem o s cu á le s s e rá n las diferencias Tendencias sociales Piense en las tend en c ia s sociales de los añ o s s e te n ta y ochen ta: é s ta s sug ieren los camb ios de los noven ta a los cu a le s te n d rá n qu e a d a p ta rs e las organizaciones. Piense, por ejemplo, en los camb ios del valor concedido a la educación supe rio r, el m atrim on io y la s p refe renc ias p a ra la s comp ras. A princip ios de los añ o s se sen ta , en E s tado s Unidos, m eno s del veinticinco por ciento de los eg resados de e scu e las de e n señ an z a m ed ia se in sc rib ían p a ra c u rs a r estud io s supe rio res. Pa ra 1978. la c an tid ad h ab ía alcanzado el c u a re n ta y nueve por ciento y en 1992. llegó al s e s e n ta por
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