Sistemas operativos modernos

Mark Russinovich y Dave Solomon saben todo acerca de Windows 2000 y fueron de gran ayu­ da. Quiero expresar un agradecimiento especial a Al Woodhull por sus valiosas reseñas y por idear muchos problemas nuevos para el final de los capítulos. Mis estudiantes también contribuyeron con comentarios y retroalimentación, sobre todo Staas de Jong, Jan de Vos, Niels Drost, David Fokkema, Auke Folkerts, Peter Groenewegen, Wilco Ibes, Stefan Jansen, Jeroen Ketema, Joeri Mulder, Irwin Oppenheim, Stef Post, Umar Rehman, Daniel Rijkhof, Maarten Sander, Maurits van der Schee, Rik van der Stoel, Mark van Driel, Dennis van Veen y Thomas Zeeman. Barbara y Marvin siguen siendo maravillosos, como siempre, cada uno de forma singular. Por último, pero no por ello menos importante, quiero agradecer a Suzanne su amor y pacien­ cia, para no mencionar todos los druiven y kersen, que últimamente han sustituido al sinasap- pelsap. Andrew S. Tanenbaum

RkJQdWJsaXNoZXIy MjI4NDcx