Técnicas del automóvil motores

Posteriormente puede efectuarse un lapeado de la superficie del cilindro, para lo cual es sus­ tituida la cabeza por otra de cepillo de puntas metálicas para pulir la superficie esmerilada. Am­ bas operaciones se realizan vertiendo abundante cantidad de lubricante en su transcurso. Finali­ zadas estas operaciones, el cilindro queda con las dimensiones previstas y una superficie pulida y rayada finamente, formando un ángulo aproximado de 60°, como indica la Figura 6.21, lo cual propicia la retención de partículas de aceite procedentes de las salpicaduras con el giro del ci­ güeñal, que mejoran el engrase de los cilindros, disminuyendo los rozamientos. 1 Figura 6.21 Cuando el desgaste de un cilindro es tal que no existe posibilidad de rectificado, deberá procederse al encamisado, que consiste en montar nuevas camisas en el cilindro. Con ello se vuelve el motor a su cilindrada original. Las nuevas camisas son montadas en el cilindro en prensas especiales. Con anterioridad debe rectificarse el cilindro hasta un diámetro de 0,05 mm menor que el exterior de la nueva camisa, con el fin de que ésta entre con interferencia en el cilindro y quede allí aprisionada. Después de realizado el encamisado es necesario un recti­ ficado o esmerilado de los cilindros hasta la medida adecuada. Con ello se consigue eliminar las posibles defomiaciones que se hayan producido en la operación de montaje. Las operacio­ nes de rectificado quedan suprimidas para los motores equipados con camisas húmedas. En éstos, cuando el desgaste sobrepasa las tolerancias marcadas por el fabricante, se procede a la sustitución de los conjuntos camisa-pistón (equipo motor). 6.4 VERIFICACIÓN DE LOS PISTONES En la operación de desmontaje del motor, el pistón sale unido a la biela, bien por la parte su­ perior del cilindro (si la cabeza de biela lo permite), o bien por la inferior. Para su verificación no es necesario desmontarlo de la biela, aunque esta operación sea imprescindible en la necesi­ dad de sustituir el pistón. Con anterioridad a la realización de las verificaciones correspondien­ tes, es necesario limpiar la carbonilla adherida a la cabeza del pistón, para lo cual se desmon­ tarán los segmentos con la ayuda de un útil apropiado, como muestra la Figura 6.22. En esta operación de limpieza no deben rayarse las superficies, siendo preferible realizarla con algún producto disolvente. Posteriormente, hay que asegurarse que los orificios de drenaje del aceite en la ranura del segmento de engrase no están obstruidos.

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