Técnicas del automóvil motores

je, debiendo entrar el bulón en su alojamiento sin dificultad y mantenerse en posición sin caerse, tal como ya se ha explicado. El juego de montaje de los bulones flotantes suele ser de 0,01 mm. En los motores donde la disposición de montaje del bulón es de tipo fijo en los alojamientos del pistón y articulado en el pie de biela, la comprobación de la holgura entre el casquillo del pie de biela y el bulón se realiza con micrómetro (Fig. 6.31), de manera similar a la descrita ante­ riormente. Cuando la holgura en esta articulación sea excesiva, se procederá a sustituir el cas­ quillo del pie de biela. Si existe holgura del bulón en su alojamiento del pistón deberá ser susti­ tuido el conjunto, desestimándose en este caso la implantación de un bulón de sobremedida y el consiguiente escariado del orificio del pistón, que no garantiza la suficiente precisión en el ajus­ te con interferencia entre ambos. / \ Figura 6.31 Figura 6.32 En los casos de bulón fijo a presión en el pie de biela, para efectuar el montaje debe calentar­ se ésta en hornos adecuados, hasta una temperamra aproximada de 350 “C, con el fin de obtener la dilatación conveniente para una correcta ejecución del montaje. Posteriormente se inserta el bulón utilizando una guía D (Fig. 6.32), a la que se fija el bulón E. El conjunto bulón, pistón y biela se apoya en el soporte C, presionando la guía en una prensa. Esta operación debe ser reali­ zada lo más rápido posible, con el fin de evitar el enfriamiento de la biela. La temperatura al­ canzada en el pie de biela durante el calentamiento, puede ser medida con la ayuda de un lápiz termocromático, mediante el cual se marca la zona a medir. Cuando se alcanza la temperatura deseada, se produce un cambio de color en la marca realizada. Finalizada la operación de ensamble, deberá comprobarse que el bulón ha quedado bien po- sicionado en sus alojamientos del pistón, sin que sobresalga por ninguno de los extremos, pues produciría ralladuras en el cilindro. También debe verificarse que gira libremente en sus aloja­ mientos. Debiendo sustituir uno o más pistones de un motor, ha de procurarse que todos tengan el mismo peso, a fin de evitar posteriores desequilibrios en el funcionamiento del motor. La diferen­ cia de peso máxima admisible es de 4 gramos generalmente, aunque, como es lógico, en los pisto­ nes de mayor diámetro esta tolerancia aumenta (hasta 8 gramos a partir de 85 mm de diámetro). El desgaste de los segmentos se comprueba midiendo su espesor con un micrómetro (Fig. 6.33) e introduciéndolos posteriormente en el cilindro y midiendo la separación entre sus pun­ tas. El segmento debe quedar bien centrado en el cilindro, para lo cual basta empujarlo y guiarlo con el propio pistón. La separación entre puntas debe estar comprendida entre 0,2 y 0,4 mm para los segmentos de compresión y de 0,4 a 1,2 mm para los de engrase. Si se sobrepasa esta tolerancia, se sustituirán los segmentos. Los segmentos que se monten en un cilindro deberán ser de la sobremedida del mismo, pues una medida superior impide su montaje y otra inferior deja una excesiva separación entre puntas. En cualquiera de los casos, queda modificada la presión lateral, con los consiguientes inconvenientes.

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