Técnicas del automóvil motores

lo cual supone que la f.e.m. inducida en cualquiera de estos arrollamientos es directamente pro­ porcional a su número de espiras y a la variación del flujo, e inversamente proporcional al tiem­ po en que se produce la variación. Así pues, cuando el interruptor abre el circuito, se induce f.e.m. en el secundario de varios miles de voltios, dado su elevado número de espiras. Esta tensión queda aplicada a la bujía, haciendo saltar en ella la chispa. La f.e.m. inducida en el primario cuando se abre el interruptor (del orden de 300 V) queda aplicada al condensador, produciendo su carga. - 4 ' 4 — /TOQQQQPs v v W X T v + - Figura 11.29 Durante el tiempo que dura la corriente de carga, entra una cierta cantidad de electricidad al condensador. La energía puesta en juego por la corriente eléctrica queda almacenada en el cam­ po eléctrico en forma de electricidad estática. Se dice que el condensador está cargado cuando la d.d.p. entre sus armaduras es igual a la tensión aplicada. En tal instante cesa la corriente de car­ ga. La energía almacenada en el campo eléctrico del condensador es = 1/2 julios, donde C es la capacidad del condensador expresada en faradios. Ya abiertos los contactos del ruptor, comienza la descarga oscilante del condensador a través del arrollamiento primario, que ha formado con el condensador un circuito oscilante. La energía almacenada con anterioridad en el arrollamiento primario es devuelta por éste cuando se corta la corriente y parte de ella es transferida al condensador, donde queda almacenada en su campo eléctrico. Inmediatamente, el condensador se descarga sobre el arrollamiento primario, repitién­ dose sucesivamente el proceso hasta que la energía se disipa en calor en el circuito. Las descargas del condensador establecen una corriente en el primario, mientras los contac­ tos del ruptor siguen abiertos, de manera que la autoinducción aparecida en este arrollamiento cuando cesa la corriente provoca la carga del condensador. Como el sentido de la corriente de carga está cambiando periódicamente, en el arrollamiento primario se suceden alternativamente unas variaciones de flujo que afectan al arrollamiento secundario. De otra parte, la alta tensión inducida en el secundario al abrirse los contactos del ruptor queda aplicada a la bujía, haciendo saltar la chispa entre sus electrodos. La tensión a que esto tiene lugar se llama tensión de encen­ dido y, tan pronto como se alcanza queda ionizado el espacio cercano a los electrodos, disminu­ yendo la resistencia eléctrica de la distancia disruptiva, facilitándose el paso de corriente, con lo que se inicia el salto de chispa. Con ello, la tensión necesaria para que siga saltando la chispa se hace mucho menor {tensión de inflamación) y, mientras dura ésta, ofrece a la mezcla ocasión de inflamarse si no lo había hecho con anterioridad. En la Figura 11.30 se han representado las variaciones de corriente y tensión (primaria y se­ cundaria) en función del tiempo. En el gráfico correspondiente a la corriente primaria, pueden verse las oscilaciones y los cambios de sentido de ésta en el momento de abrirse los contactos del ruptor. Las mismas oscilaciones se producen en la tensión primaria. En el gráfico correspon­ diente a la tensión secundaria, puede observarse el máximo valor alcanzado por la tensión de encendido y la subida brusca de la misma {aguja de tensión), para descender también brusca­ mente al valor de inflamación, en un cortísimo espacio de tiempo. La tensión de inflamación es ondulada, debido a las variaciones de flujo en el primario. La duración de la chispa supone un corto espacio de tiempo en que los contactos del ruptor permanecen abiertos.

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