Técnicas del automóvil motores

11.12 VERIFICACIÓN Y CONTROL DEL SISTEMA DE ENCENDIDO Dadas las características de este sistema, las anomalías de funcionamiento que pueden producirse son imputables en la mayor parte de los casos a los contactos del ruptor o las buj­ ías. Los contactos del ruptor están sometidos al desgaste y corrosión propios de su funciona­ miento, que implica la sustitución de los mismos cada cierto tiempo. En cuanto a las bujías se refiere, el salto de la chispa entre sus electrodos produce el desgaste de los mismos, con au­ mento de la separación, que a partir de un determinado valor produce fallos en el encendido de la mezcla, haciendo necesaria la sustitución de las bujías, aunque en algunos casos es sufi­ ciente con efectuar un reglaje de la separación de electrodos, doblando convenientemente el de masa mediante un útil, como muestra la Figura 11.46. Figura 11.46 Las averías del circuito de encendido pueden clasificarse en dos grandes grupos: las que im­ piden la puesta en marcha del motor y las que producen fallos en el funcionamiento del mismo. El procedimiento a seguir en el primer caso consiste en verificar si se produce chispa en la bujía en el momento adecuado, condición imprescindible para la puesta en marcha del motor. En el segundo caso, se verifica el ftincionamiento del circuito de encendido por medio de analizado­ res, hasta detectar el componente objeto de los fallos, como se verá más adelante. Cuando el motor de arranque arrastra normalmente al de combustión, pero éste no llega a ponerse en marcha, la avería estará localizada probablemente en el circuito de encendido o en el sistema de alimentación de combustible. Lo primero y más rápido es controlar si hay pre­ sencia de chispa en la bujía, para lo cual, se desconecta el cable de alta tensión de una de ellas y se acerca al bloque motor sin llegar a tocarlo. Si se producen chispas (accionando el arran­ que), lo más probable es que el circuito de encendido esté bien; no obstante el defecto puede ser debido a las bujías o a un punto de encendido defectuoso, aunque pueden existir averías mecánicas, como anomalías en el sistema de alimentación de combustible, pérdida de com­ presión del motor, roturas mecánicas, etc. Cuando se ha comprobado que no saltan chispas en la bujía, seguiremos la verificación desconectando el cable de alta tensión de la bobina, en su unión al borne central del distribui­ dor, para acercarlo a masa como en el caso anterior. En estas condiciones deben saltar chispas cuando se acciona el motor de arranque, o se abren y cierran a mano los contactos del ruptor. Si ocurre así, la avería está en la tapa del distribuidor o el rotor, que habrán de desmontarse para su verificación individual. En el caso contrario, la avería está en el circuito de baja ten­ sión o en el secundario de la bobina. En el circuito de baja tensión se comprobará que los terminales se encuentran perfectamente aislados y el estado de los contactos del ruptor es bueno. También se verificará si llega corriente sucesivamente al ruptor, bobina de encendido e interruptor de encendido. Conectando una lámpara de pruebas o un voltímetro entre la entrada al ruptor y masa (Fig. 11.47) y girando a mano el motor de combustión con el interruptor de encendido conectado, llegará un momento

RkJQdWJsaXNoZXIy MjI4NDcx