Técnicas del automóvil motores

En muchos sistemas actuales de recirculación de gases de escape se emplea una válvula EGR de mando eléctrico (Fig. 17.15), cuya bobina es alimentada desde la central electrónica del sis­ tema de inyección con impulsos de tensión de período variable en función del régimen del mo­ tor, la carga y la temperatura del líquido refrigerante, fundamentalmente. Cuando se aplica ten­ sión a la bobina se produce el desplazamiento del núcleo deslizante que abre la válvula para dar paso a los gases de escape hacia el colector de admisión. En el extremo del vástago de mando de la válvula se acopla un potenciómetro conectado a la central electrónica, de la que recibe ali­ mentación, y a la que envía una señal de tensión en correspondencia con la posición de abertura de la válvula, lo que indica a la central electrónica la cantidad de gases recic ados. Hada el colector de admisión 1- Potenciói Figura 17.15 § Gas de escape Válvula La estrategia de mando de este tipo de electroválvula está determinada por un campo de cur­ vas características grabadas en una memoria, que establecen el grado de apertura de la válvula de recirculación para cada una de las condiciones de funcionamiento del motor, limitando el reciclado a una tasa del 18% con respecto a la cantidad de aire aspirado, y bloqueando la válvula para condiciones de funcionamiento en frío del motor (hasta los 35 °C), ralentí, retenciones o plenas cargas, entre otras. La Figura 17.16 muestra la ubicación de esta válvula, en este caso directamente sobre la culata, en el conducto de escape del cilindro número cuatro. Un tubo de acero lleva desde la válvula los gases de escape hacia el colector de admisión. Válvula de recirculación de gases de escape Tubo de alimentación hacia el colector de admisión Figura 17.16 17.6 CONVERTIDORES CATALITICOS Los contaminantes emitidos por el motor pueden reducirse eficazmente mediante un trata­ miento catalítico ulterior, que sumado a la acción sobre el proceso de combustión y el tratamien­ to térmico de los gases de escape, da como resultado una emisión limpia de contaminantes. Con este proceso se trata de acabar de quemar el combustible no consumido en la cámara de combus­ tión y que sale por el colector de escape junto a los gases quemados. Con el tratamiento catalíti­ co de los gases de escape se consigue aumentar considerablemente la velocidad de las reaccio