Técnicas del automóvil motores

solamente los hidrocarburos saturados HC y CO, mientras que para reducir la emisión de SO 2 se recurre a limitar la temperatura de funcionamiento del catalizador a 350 “C, dado que por debajo de ella no se producen las reacciones de formación de este compuesto. La reducción del contenido de azufre de los actuales combustibles Diesel (inferior al 0,05%) propicia la catálisis total de los gases de escape. CO 3 H,0 NO, SO, Figura 17.33 Puesto que los motores Diesel emiten una cantidad importante de partículas sólidas, se hace necesario disponer en el sistema de escape unos filtros de partículas, como el representado en la Figura 17.34, que tienen una estructura similar a los monolitos de los catalizadores, con la dife­ rencia de que las paredes de los canales longitudinales de cerámica son porosas, para comunicar con las adyacentes, presentando cada uno de los conductos, alternativamente, un extremo cerra­ do para obligar a los gases a pasar a través de dichas paredes, reteniendo en ellas las partículas sólidas presentes en el gas de escape, así como los sulfatos combinados con ellas. T om ^ depresión Carcasa soporte Sonda de tfyriperatura Flujo de gases Canales Paredes permeables a los gases Obturadores Figura 17.34 La utilización de los filtros de partículas presenta el inconveniente de que las partículas de carbonilla e hidrocarburos pesados quedan acumuladas en el interior del filtro obstruyendo poco a poco el paso del gas, y generando una contrapresión en el escape que resta potencia al motor. Cuando esta contrapresión llega a valores excesivos se hace necesario sustituir el filtro, o bien proceder a la regeneración del mismo quemando dichas partículas, lo que puede lograrse de forma natural cuando la temperatura de los gases de escape es elevada, como ocurre en la mar­ cha a plenos gases durante un tiempo prolongado. Cuando no se dan estas condiciones, como ocurre en circulación del vehículo en ciudad o marcha en carretera con cargas parciales, es preciso efectuar periódicamente una regeneración forzada del filtro de partículas, que se produce actuando sobre el sistema de inyección de com­ bustible, al que se comanda desde la unidad de control del motor para que efectúe una inyección suplementaria (en determinados momentos) al final de la combustión normal, de manera que los gases evacuados del cilindro salgan todavía ardiendo y completen su combustión en su recorrido por el filtro, donde queman las partículas de hidrocarburos allí depositadas, completando la regeneración. Durante esta fase, la central electrónica desactiva el sistema EGR.