Técnicas del automóvil motores

son captadas por los diversos sensores, como el de caudal de inyección 6 instalado en la bomba, el de carga del motor ubicado en el pedal del acelerador 10, el de régimen tomado del corres­ pondiente sensor 7, el de temperatura del motor tomado de la correspondiente sonda 8 y cual­ quiera otro, como puede ser en este caso la presión atmosférica, tomada por la sonda 9. Las señales que llegan a la unidad de control desde todos estos sensores son analizadas y transfor­ madas en una corriente de mando que se envía a la electroválvula de control para autorizar el reciclado de los gases de escape en determinadas circunstancias grabadas en la memoria de la unidad de contro . Con ello se obtiene un control preciso de las condiciones de ftincionamiento del motor en las que se produce el reciclado de gases y la duración del mismo para conseguir emisiones escasas de productos contaminantes sin penalizar las prestaciones del motor. Las estrategias de mando de los sistemas de recirculación de gases de escape suelen adaptar­ se a las características del motor, de manera que se efectúe el reciclado en determinadas condi­ ciones de marcha. Por ejemplo, para regímenes del motor inferiores a 3.500 r.p.m se activa el reciclado, siempre que la carga del motor no sobrepase un determinado valor, a partir del cual se considera que es necesaria toda la potencia del motor para impulsar al vehículo. Por otro lado, la desconexión del reciclado se produce cuando hay una variación de carga importante, en cuyo caso la unidad de control interpreta que se está produciendo una aceleración y corta el reciclado, como también lo hace para valores de presiones y temperaturas inferiores a 915 mbar y 50 “C, respectivamente. La presión de soplado del turbocompresor está controlada convencionalmente por una válvu­ la de Waste-gate; pero en los sistemas de inyección con gestión electrónica, esta válvula es sus­ tituida por una cápsula neumática comandada por una electroválvula, que a su vez es gobernada por la unidad electrónica de control del sistema de inyección. La Figura 22.27 muestra en es­ quema el conexionado de los componentes del sistema de control del turbocompresor, cuya válvula de desvío de gases 5 se activa por una cápsula de membrana 6 emplazada en la carcasa del turbo (de manera similar a los sistemas convencionales), que se enlaza neumáticamente por un conducto a la electroválvula 1, que a su vez está conectada por un tubo al colector de admi­ sión y por otro a la bomba de vacío. Figura 22.27 La electroválvula de mando 1 es comandada por la central electrónica 8 mediante una co­ rriente eléctrica de mando, cuya frecuencia determina el tiempo de activación. La unidad electrónica de control regula la corriente de mando en función de las condiciones de marcha del motor y, ftjndamentalmente, de las señales que recibe de la presión de soplado del turbocompre­ sor, generada por el captador de presión 7, y la temperatura del aire soplado, transmitida por la sonda 2 emplazada en el intercambiador de calor para el aire de admisión. De acuerdo con estas señales se activa la electroválvula para hacer caer la presión de soplado en las condiciones esta­ blecidas.

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