Técnicas del automóvil motores

vula se produce en dos fases; En la primera se le aplica una tensión aproximada de 80 V (fase de activación), estableciéndose una corriente de 20 A durante 0,3 milisegundos aproximadamente, con la cual se provoca una subida rápida de la aguja. En la segunda fase se aplica una tensión de 50 V (fase de mantenimiento), con la que se logra una corriente de 12 A, suficiente para mante­ ner activada la electroválvula, limitando así la potencia eléctrica absorbida. La Figura 22.53 muestra la gráfica de la tensión de activación de un inyector, que en este caso efectúa la inyec­ ción en dos tiempos; una preinyección y la inyección principal, separadas por un tiempo de reposo. I(ms) Figura 22.53 La cantidad de combustible inyectado depende del número y diámetro de los agujeros del inyector, del tiempo de activación de la electroválvula de mando y de la presión del combus­ tible en la rampa de inyección. Si el tiempo de activación de la electroválvula es corto, la aguja del inyector se levanta ligeramente, puesto que el conjunto de aguja y émbolo de man­ do presentan una cierta inercia. Con ello, la cantidad de combustible inyectada es pequeña y la presión de inyección es inferior a la reinante en la rampa. Cuando la duración de los impul­ sos de mando de la electroválvula es mayor, la aguja del inyector se levanta totalmente y la cantidad de combustible inyectada es grande, al tiempo que la presión de inyección alcanza el mismo valor de la presión en la rampa. La Figura 22.54 muestra un diagrama de los caudales de inyección obtenidos en función del tiempo de apertura del inyector, para diferentes valores de presión en la rampa de inyección. Figura 22.54 En muchos sistemas actuales de inyección Diesel con control electrónico se emplean inyectores de tipo piezoeléctrico, como el representado en la Figura 22.55, que tienen una estructura similar a la de los convencionales, pero sustituyen la bobina de activación por un conjunto piezoeléctrico, en el que se disponen sucesivamente los cristales entre placas metálicas, formando una especie de pila electrónica, en la que se conectan alternativamente las placas metálicas a positivo y a masa. Cuan­ do se aplica una tensión de aproximadamente 100 V a las placas metálicas, los cristales piezoeléc- tricos inte^uestos entre ellas sufren una elongación y, sumadas las de todos, suponen un aumento de la longitud del conjunto, mediante el cual puede activarse la válvula de desahogo de la cámara de la presión de mando del inyector con la que se logra la activación.

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